Seguidores

lunes, 18 de julio de 2016

Insuficiencia crónica

Y de repente sentí esas irremediables ganas de llorar a bordo del autobús, pero no lo iba a hacer, tenía que mirar por mi dignidad y mantenerme fuerte, como se supone que hacen los hombres valientes. Una vez más me guardé las cosas.

Y es que no me pesaba el hecho de que las cosas no fluyeran, o el hecho de que la otra persona no se interesaba en mi, me pesaba el hecho de que como siempre, yo había tenido razón. 

Una vez más las cosas habían salido como mi negatividad había planeado, una vez más el 'casi' tocaba a la puerta. 

A veces pareciera que reciclo lo que escribo, siempre hablo de como todo salió mal, de cómo las cosas salieron del modo negativo en que las preví, pero no es que recicle las notas, es solo que inevitablemente siempre terminan pasándome las mismas cosas. 

¿Duele? Sí, quizá sí, pero ni modo, gajes del oficio.

Realmente no sé que me queda esperar ahora, imagino que un lenta y cansada espera. Esperar a que poco a poco dejemos de hablar, de escribirnos, de vernos. Creo que esa es la parte más dolorosa: tener que esperar. Porque estúpidamente en este mundo nadie tiene la suficiente sensatez para cortar las cosas de tajo. 

"-Hay que ir a ver 'Buscando a Dory'. 

-Uy, ya la vi"

Se recitaba una vez más ese diálogo en mi vida. Y así con un sinfín de películas mas que terminé viendo solo, porque a otros les parecí insuficiente. 

Quizá ese sea el verdadero problema, quizá es que no parezco lo suficiente para nadie.

Por el momento tendré que conformarme con ser suficiente para mí, aunque a veces ni yo mismo lo crea. 


miércoles, 13 de julio de 2016

Antes de ir a dormir

Cuando algo ciertamente triste ocurre en mi día, siempre termino yéndome a dormir escuchándote un par de canciones melancólicas, pero hoy decidí que no sería así. 

Me propuse disfrutar de lo que estoy viviendo, enfocarme en el ahora sin pensar lo que pueda llegar o no llegar a ocurrir en el futuro. Me propuse no pensar las cosas de más, y simplemente hacerlas por el simple placer de hacerlas. Hoy decidí irme a dormir escuchando una que otra canción clásica. 

Siempre he creído que la música clásica tiene el don de hacernos sentir completos al momento de invadir nuestros oídos. Por su simple belleza y tranquilidad que algunas piezas pueden brindarnos. 

Y sin darme cuenta, me topé con una melodía que tenía mucho tiempo sin escuchar, una melodía que hace mucho tiempo me acompañó en varios momentos llenos de tristeza, en momentos de desconcierto, de agonía. Y que me reconfortó en aquellas noches de adolescente en las que las lágrimas rodaban por mis mejillas. 

No entiendo como su tranquilidad y belleza me daba el aliento para dejar salir todo ese dolor que había dentro de mí. 

Hoy, después de mucho tiempo, vuelvo a tratar de dormir escuchando esa melodía, pero con la mentalidad de que todo puede pasar. Con pensamientos llenos de tranquilidad y fortaleza. Una vez más vuelvo a creer en mí. 

Bajo la mirada, pero solo para observar a mi nube de lluvia, que siempre me recordará que la vida es simplemente hermosa y tristemente dolorosa al mismo tiempo. Y que ver llover es hermoso, pero es aún más hermoso mojarnos bajo la lluvia. 



domingo, 10 de julio de 2016

Viajes de ida y vuelta

"Nunca dejas de sorprenderme Rafy" me decía un amigo mientras le contaba las cosas que recién me habían ocurrido, y por supuesto que estoy de acuerdo con él. Es que a pesar de mis constantes miedos e inseguridades, no sé como logro seguirme sorprendiendo a mí mismo, eso es bueno.

Mi viaje de regreso a Veracruz ha servido para terminar de responder varias preguntas que rondaban mis pensamientos. No cabe duda que el tiempo que pasé fuera de aquí, me ayudó a crecer en muchos aspectos personales. Sigo cambiando y no me parece algo malo, en cambio, me parece estupendo que cada vez mi paso por este mundo se vaya haciendo más emocionante. 

Y probablemente todas estas palabras suenan muy bien al ser leidas, pero es que por alguna razón no sé porque sigo sintiéndome confundido, con miedo. A menudo me cuestiono sobre lo que ocurre, sobre lo que pensará la gente y como me verá el mundo. Me cuesta tomar decisiones, y cuando las tomo, no lo hago en las mejores condiciones. 

He vuelto al caluroso y húmedo puerto, y en este poco tiempo, he conocido más a profundidad a alguien que ha vuelto del pasado, no sé como logró viajar en el tiempo y llegar hasta el 2016. 

Luego de todo lo ocurrido hace un tiempo, creo que el contexto en el que vivimos no es el mejor, sin embargo considero que eso no es muy importante, al final de cuentas la vida nunca se desarrollará en campos de batalla fáciles.

Temo de ti, me cuestiono, desconfío de tus palabras, pero mi esencia me impide irme. Quiero estar ahí, quiero seguirte conociendo, quiero continuar viéndote por las mañanas a mi lado al despertar, quiero viajar, quiero besarte, quiero aprender, quiero sentir, quiero ser herido, quiero seguir aprendiendo, quiero volar. 

El miedo se apodera constantemente de mi, me apresiona, pero a pesar de que lo niegue, mi subconsciente me alienta a continuar, aunque a veces no se ni que estoy haciendo. Me preocupas, como me preocupa la gente que quiero. 

No sé que esperar del resto de esta historia, sólo me queda imaginar buenos momentos, y tratar de evitar creer que las cosas saldrán mal, pero bueno, uno no puede controlar su destino. El futuro decidirá.

Hasta el momento han sido buenos momentos, y de momentos se hace una vida.

"Hazlo, enamórate de nuevo, y equivócate. Hazlo sin miedo. Posiblemente te pase lo de siempre. Si te pasa lo de siempre, sécate las lágrimas, levántate y vuelve a empezar. Te juro que no pasa nada. Enamórate y equivócate las veces que sea necesario, porque te repondrás y te levantarás de nuevo las veces que hagan falta."